Hace pocos días, la canción de la paz nos pedía contagiar la paz. Hoy os pedimos otra acción para ayudar a los demás: contagiar alegría.
¿Y cómo hacerlo?
La alegría se contagia a través de la sonrisa. Nuestra cara se transforma y nuestros ojos brillan. Pero no solo vamos a sonreír con la boca, os proponemos dibujar las sonrisas y compartirlas. En clase y en casa, coge trocitos de papel y dibuja sonrisas.
La alegría se contagia a través de la sonrisa. Nuestra cara se transforma y nuestros ojos brillan. Pero no solo vamos a sonreír con la boca, os proponemos dibujar las sonrisas y compartirlas. En clase y en casa, coge trocitos de papel y dibuja sonrisas.
Verás qué contenta estará tu familia y también tus amigos.
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