Buenos días Jesús,
Ayer me ocurrió algo muy especial. Estaba jugando con mis amigos de la clase y vi que había un niño que no jugaba, que estaba triste y solo en un rincón del patio. Fui a buscarlo y jugó con nosotros. Hoy soy feliz porque ese niño ya no está solo, es nuestro amigo.
A veces, sólo pensamos en nosotros y no nos fijamos en nuestros compañeros. Jesús, te pido que me ayudes a buscar la felicidad de los demás, aunque no sean de nuestro grupo. Ahhh y gracias por el día tan divertido que pasé ayer.
Comentarios
Publicar un comentario
Comparte tu opinión de manera responsable y evita el anonimato: Escribe tu nombre, el curso y tu cole gabrielista. Muchas gracias.